martes, 24 de julio de 2012

UNA RECLINADA EN TRINIDAD



Encontró esta low racer puesta a la venta en internet y tras una breve negociación, a los pocos días la tenía en su casa. Como la reclinada estaba totalmente desarmada, había que poner manos a la obra para verla en una sola pieza, así que a Juan Francisco Carrizo no demoró el trámite. Este cicloturista trinitario hoy nos muestra los resultados de su trabajo. 

En su email Juan Francisco me cuenta, “la reclinada se la compré por internet a Adrián Fernández, quien me contó que la había fabricado el mismo. Se la compré desarmada; la hice pintar, tapizar el asiento, le cambié las ruedas, los cambios, el manillar y algunas cositas chicas.

La distancia entre ejes de esta reclinada baja es de 1 metro con 21 cm.   La altura del asiento es de 0,33 cm., y la caja pedalera se ubica a 0.60 cm. del piso.
Tengo que hacerle alguna pequeña modificación en el alto y el largo del avance de la dirección para que me quede impecable; aunque así igual puedo andar, es a los efectos de mayor comodidad y practicidad.
Hoy –cuenta Juan Francisco- hice más de veinte cuadras en ella y me resultó cómoda, aunque me cansé un poco porque hace tiempo que no ando ni en la bici montaña. Creo que con el correr de los días las cosas va a mejorar... eso espero al menos.

Contrariamente a la inestabilidad de la que tienen fama las reclinadas bajas, Juan francisco reconoce, “que no me dio mayor trabajo salir a la calle y mantener la estabilidad”.
Como buen cicloturista Juan Francisco explica que - los soportes que tiene para las alforjas -sobre la horquilla trasera - no los traía, se los fabricamos con mi yerno y quedaron bien y muy prácticos.
Otro detalle que tuve que solucionar fue el de la horquilla delantera; al acortar el caño del pedalier para que quedara mas a mi medida, la palanca del pedal pegaba en la rueda. 


Primero probé girando la horquilla que tenía y cambié la cubierta de la rueda delantera, (la que tenía era 20 x1.95, le puse una 20 x1.75), con esas dos cosas solucioné en principio. 
Para robarla di una vuelta y noté que me quedaba muy nerviosa;  entonces hablé con el bicicletero del barrio y con una horquilla 26 me hizo una para rodado 20. 
Quedó con apenas una curvatura hacia atrás como podrás ver en la foto; así de esa manera quedó impecable y los problemas se solucionaron.
Creo –dice Juan- que esto es todo lo que te puedo comentar de la lowracer.   Doy vuelta en redondo en las esquinas y se puede mantener la estabilidad sin problemas. Creo que me va a dar muy buen rendimiento luego de agarrar entrenamiento.

Juan Francisco Carrizo, que es un enamorado del cicloturismo, ha recorrido el  Uruguay en solitario en el año 2006 y 2008 y describe esta disciplina como un ejercicio de libertad inigualable. 
Desde su querida Trinidad y mientras alista su reclinada, este cicluturista   seguramente sueña con otro intinerario para recorrer… ahora como ciclista reclinado?